El Mago es la encarnación de la acción deliberada en los Arcanos Mayores. Significa que el proceso creativo toma algo intangible -una idea, una ráfaga de inspiración o un concepto- y lo convierte en algo tangible mediante la acción. Los cuatro símbolos del tablero representan las cuatro elementos en el tarot. El Mago los utiliza todos en su proceso, un bonito guiño a la abundancia que puede surgir de una vida bien equilibrada. De hecho, el primer plano y la parte superior de la tarjeta están llenos de exuberantes flores.

El Mago es también, cómo decirlo… magia. Él no es «El Trabajador», después de todo. La carta también podría llamarse «El Alquimista», ya que los símbolos presentes están cargados de significado alquímico. Sus brazos extendidos conectan los cielos y la tierra. Está a punto de convertir el plomo en oro.

Para que El Mago tenga éxito, debe mantenerse enfocado y presente, permitiendo que su cuerpo se convierta en un vehículo para las ideas. Con los brazos extendidos en diagonal, su cuerpo escenifica la conexión entre la inspiración divina y el mundo físico, o la tierra. Él mismo encarna el proceso creativo. Sin él, no habría nada que conectara los dos y no habría forma de hacer «algo de la nada».

Por eso, El mago ilustra la aparente paradoja de la creatividad. Necesitas estar presente y abierto a las ideas mientras estás arraigado en la realidad y dispuesto a hacer algo para que la idea se haga realidad. La apertura, el enfoque y la sensación de movimiento le dan a El Mago una ventaja dinámica y emocionante. Esta carta invita al buscador a abrirse a la inspiración y perderse en el trabajo que exige.

Ver esta carta en las lecturas significa un momento de gran acción y potencial. Todas las herramientas están dispuestas sobre la mesa y la escena ya es exuberante. El desafío de esta carta es mantener las condiciones que permitan que florezca la creatividad. Una combinación de experiencia (el mago no es un novato), atención plena (debe estar presente para canalizar sus ideas) y acción (hacer el trabajo para realmente hacer algo) permite que el mago florezca.

Además, El Mago significa un momento para proceder con confianza y creencia en las habilidades de uno. No se recomienda la arrogancia y la pretensión; sin embargo, la falsa modestia y la reticencia son igualmente dañinas. Sobre todo, El Mago debe crear activamente. Aprende haciendo y permite que algo más que el ego brille a través de tu trabajo.